¿Ha intentado reducir ciertos alimentos de su dieta? ¿Ir al gym o entrenar fuerte y aún no ver resultados?

Los recorridos de fitness son un esfuerzo y requieren mucho más que ejercitarse.

Aunque aparentemente esté haciendo el trabajo que cree que debe realizar para bajar de peso, puede haber otros factores clave que le están impidiendo perder los kilos.

Las que siguen son 13 razones por las que no está perdiendo peso.

Esto requiere pequeños cambios fáciles en la forma de hacer las cosas.

1. NO TIENES EXPECTATIVAS PRÁCTICAS.

Cuando no he tenido las expectativas adecuadas o no he tenido el estado mental adecuado, he fracasado estrepitosamente.

Todos buscamos ser felices y para muchos eso significa tener el cuerpo que quisiéramos.

En varias ocasiones he alcanzado mi objetivo de peso.

Sin obstante, pronto volví a engordar.

¿Por qué?

¿Por qué? Bajaba de peso por las razones incorrectas, me fijaba en objetivos a corto plazo como querer entrar en ese vestido o me comparaba con los otros y debía volver a la pregunta:

¿Por qué me gustaría perder peso?

Una vez comprobé que era por querer ser una persona más sana y feliz para mis hijos y para mí, no quería que mi cuerpo me impidiera hacer las cosas que deseaba.

Si deseas perder peso, tienes que afrontarlo con la mentalidad adecuada y las razones correctas.

2. CONSUMES COMIDAS PREPARADAS

Las comidas preparadas son excelentes para la comodidad, pero ¿a qué precio?

No siempre se sabe con exactitud qué ingredientes o nutrientes poseen los platos preparados.

La producción en masa puede suprimir las vitaminas y los minerales, al igual que el exceso de productos químicos.

La generalidad de los platos preparados tienen un alto porcentaje de sal y azúcar.

Aproximadamente el 70% del sodio de la dieta americana estándar (SAD) pertenece a los platos preparados.

Los investigadores han comprobado que cada gramo extra de sal incrementa el riesgo de la obesidad en un asombroso 25%.

Las pruebas demuestran ahora que es el azúcar el que nos hace aumentar de peso.

Trata de cocinar con ingredientes frescos y no alterados.

Vea este plan de alimentación ceto de 7 días?, adecuado para un estilo de vida ajetreado sin perjudicar la salud.

3. ESTÁS ESTRESADO

En el momento en que estamos estresados, el organismo se prepara para una emergencia. Se inunda nuestro sistema con cortisol, la Hormona del Enfasis (y del Acumulación de Grasa).

El excedente de cortisol puede producir un elevado nivel de azúcar en la sangre y provocar que el cuerpo almacene un exceso de grasa. ?

Esta hormona hace que nos decantemos por alimentos ricos en grasas y azúcares.

¿Cómo se soluciona?

En ese caso, lo primero es identificar qué es lo que le hace ponerse estresado.

A través de ello, puede tomar acciones para evitar estas situaciones o elaborar mejores estrategias de afrontamiento.

He aquí otras maneras de REDUCIR el estrés y descender los niveles de cortisol:

• La conciencia plena, la reflexión, los ejercicios de relajación y el ejercicio de yoga.
• Dedicar tiempo... a la familia y los que están en contacto con ella.
• Mirar comedias y echarse a reír a carcajadas.
• Acudir a la música relajante o a los tonos de la naturaleza.

4. CREES QUE PODRÁS VENCER A LOS CARBOHIDRATOS

La forma más rápida de perder peso es simplemente reducir el consumo de carbohidratos.

Sin obstante, la gente piensa equivocadamente que una galleta o unas chips no les van a perjudicar tanto.

El azúcar es una consecuencia que no es buena para ti, los estudios demuestran que es adictiva, produce cáncer y te hará engordar.

Si te gusta el dulce como a mí, ¿por qué no preparas algunos dulces sin azúcar?

Y lo más importante es que todos encajan en mi dieta.

Al adoptar el estilo de vida cetogénico, no sólo perdí peso rápidamente, sino que nunca tuve que preocuparme por recuperarlo.

Por qué no está perdiendo peso

5. NO PRACTICAS EL CONSUMO CONSCIENTE DE ALIMENTOS

Me encantaba quedarme en el sofá y cenar frente al televisor con mi serie favorita.

 fue así hasta que me he dado cuenta de que no perdía peso.

Comer cuando me distraía con la TV o las redes sociales me inducía a comer en exceso.

Una vez que empecé a ser más consciente de mi forma de comer, empecé a perder peso.

Las investigaciones revelan que la alimentación consciente puede ayudar a perder peso, a cambiar los hábitos de consumo e incluso a reducir el malestar psicológico.

Promueve el comer con propósito e intensamente mientras se aprecia cada bocado.

¿Y de qué manera te hace perder peso?

Si comemos más despacio, es más posible que consumamos menos calorías.

Para convertirse en un comedor responsable, se debe masticar despacio, dejar los cuchillos entre bocado y bocado, dedicar tiempo y evitar las atracciones.

De modo que apaga la televisión y aparta la vista del móvil y aprende a disfrutar de tus alimentos.

6. NO ESTÁ CONSUMIENDO LO SUFICIENTE DE GRASA

Sí, has leído bien!

Las grasas que son saludables, por ejemplo, el aceite de oliva, el aceite de aguacate, el aceite de coco y las que se incluyen en el pescado azul y en los huevos, son las que realmente impulsan la pérdida de peso.

Al revés de lo que nos explicaron en los años 80 y 90, las grasas no nos hacen subir de peso.

Las grasas saludables son fundamentales para la pérdida de peso, ya que contribuyen a reducir los niveles de insulina, a aumentar la sensación de saciedad durante mucho más tiempo y a eliminar los antojos.

Procure incluir grasas saludables en todos sus platos.

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7. ¿CONFIARSE A LOS EJERCICIOS?

Todos conocemos que el ejercicio permite quemar calorías.

¿Sabes qué?

¡No quema tantas calorías del todo!

Por ejemplo, una persona promedio que corre treinta 30 minutos sólo puede quemar 300 calorías.

La mayoría de la gente también come en abundancia antes y después de hacer ejercicio y suponen que su ejercicio quemará esas calorías adicionales.

No valoramos bien el ejercicio y exageramos el número de calorías quemadas.

Nos agradezca o no, el ejercicio no consume tantas calorías como quisiéramos.

8. LA FALTA DE DORMIR NECESARIO.

La pérdida de sueño puede provocar un cierto aumento de peso. Un informe de investigación descubrió que las mujeres que dormían 5 horas por noche eran más susceptibles de ganar peso que las que dormían 7 horas por noche.

No disponer de suficientes horas de sueño afecta a la segregación de cortisol, una de las hormonas que regula el consumo de alimentos.

Si está usted fatigado, es probable que se ahorre el ejercicio o sencillamente que se ponga menos en movimiento, lo que significa quemarse menos calorías.

Es fundamental dormir lo suficiente si estás intentando conseguir perder peso, no sólo por cómo te afectará físicamente, sino incluso mentalmente.

La falta de sueño te hace sentir malhumorado, desorientado e incluso deprimido o enfadado.

9. NO HAY HIDRATACIÓN.

Tomar agua y permanecer hidratado es algo que debes hacer sin importar el tipo de vida que desees llevar.

El agua desempeña un papel importante para la pérdida de peso.

La hidratación y la presencia de agua en su organismo cuando comienza a comer le permitirán comer menos y hacer que se sienta satisfecho durante más tiempo.

Cuando se hidrata, el metabolismo se agiliza y un metabolismo de mayor velocidad hace que quemar grasa y la pérdida de peso sea mucho más factible.

Un montón de gente también confunde la sed con el hambre. Así que la mayoría de las veces coge un vaso de agua en lugar de un vaso de agua cuando tengas hambre.

10. EJERCITARSE HACE COMER MÁS

Cuando las personas se ejercitan con gran intensidad, tienden a devorar todas las calorías, si no más, que acaban de quemar.

Te encuentras totalmente hambriento y con la sensación de que te mereces un aperitivo.

Lo que significa que puede que no esté creando el déficit calórico que su cuerpo requiere para perder peso.

No considera el ejercicio como un pase libre que le permite comer más; la pérdida de peso se produce sobre todo como resultado de la dieta.

11. ESTÁN COMIENDO AZÚCAR FALSO.

El cuerpo no sólo necesita calorías.

Tu cerebro es el que se encarga de preparar a tu cuerpo para que reciba y analice los nutrientes.

Los investigadores nos dicen que cuando engañamos a nuestro cerebro haciéndole creer que va a recibir azúcar consumiendo edulcorantes sin calorías, provocamos respuestas físicas y hormonales que nos empujan a ganar peso.

El hecho de sustituir el azúcar por azúcar artificial no soluciona el problema subyacente, que es tu forma de actuar.

Una desintoxicación del azúcar ayuda a conseguir un cambio en estos hábitos alimenticios y es otro concepto clave en los planes de dieta.

12. COMIENDO EN EXCESO ALIMENTOS  SANOS Y LIMPIOS

Es un hecho muy simple:

Consumir más calorías de las que se pueden quemar provoca un aumento de peso.

Y no tiene importancia la procedencia de esas calorías.

Consumir en exceso alimentos saludables es tan perjudicial como la comida basura a la hora de aumentar de peso.

Algunos alimentos sanos e integrales también son densos en calorías.

Por ejemplo, un aguacate mediano posee 250 calorías y 23 gramos de grasa. Una porción de almendras contiene 162 calorías y 14 gramos de grasa.

Sin obstante, no hay que desanimarse a la hora de comer estos ingredientes. Ofrecen grasas saludables y micronutrientes.

Simplemente, intenta limitar los tentempiés saludables y procura controlar el consumo de las raciones mediante una báscula para medir el peso.

13. TE BEBES TUS CALORÍAS

El simple Hecho de que tu batido esté hecho de frutos y verduras no significa que sea bajo en calorías o saludable para ti.

De todas formas, los batidos verdes te pueden hacer subir de peso si no tienes precaución.

ES BASTANTE GRANDE:

Los batidos contienen medio kilo o más de fruta o verdura de la que se comería cruda. Todo esto suma calorías extra, carbohidratos y azúcar

ES MÁS CALORÍAS DE LAS QUE TE PUEDES IMAGINAR:

También los alimentos bajos en calorías, como las frutas y las verduras, aportan más calorías.

Numerosos batidos contienen componentes como yogures, edulcorantes, sorbetes, mantequillas de frutos secos, leche e incluso helados que añaden calorías.

Los batidos adquiridos en tiendas pueden contener perfectamente entre 300 y 600 calorías en 16 onzas.

CONTIENE UN EXCESO DE AZÚCAR:

Si tu batido tiene sabor dulce, es evidente que está lleno de azúcar... la mayoría de las opciones que se compran en la tienda contienen casi tanto azúcar como una lata de refresco.

Mientras que hay muchos, muchos beneficios para la salud en los batidos, como la fibra, los antioxidantes, las vitaminas y los minerales, esa abundancia de azúcar, aunque sea de la fruta, no es saludable.

TE DEJA CON HAMBRE:

El impulso de azúcar de un batido aumenta el nivel de azúcar en la sangre y te hace sentirse cansado y con hambre par de  horas mas tarde.

Y la inexistencia de proteínas... y grasas saludables, que te mantienen saciado, también significa que te da hambre antes.